Este librito estA a proposito para leer y meditar en Cuaresma!
VIAJE HACIA LA PASCUA
CON EL CRISTO DEL EVANGELIO
Charlas de un misionero
Excerpt
VIAJE
HACIA LA PASCUA
Con
el Cristo de los Evangelios
J.
Paul (Padre Pablo) Lennon
2ª
edición revisada
VIAJE
HACIA LA PASCUA
Con
el Cristo de los Evangelios
J.
Paul (Padre Pablo) Lennon
En
aquel entonces Legionario de Cristo en
Quintana
Roo, MEXICO
2ª edición revisada
ITINERARIO
INTRODUCCION 7
1.
ZARPAMOS 11
2.
UNA EMBARCACION “FATAL” 19
3.
EL
DÍA EN QUE LO CONOCÍ 27
4.
SEGUIR A JESÚS
35
5.
SUS OJOS 43
6.
SUS MANOS 49
7.
¿DÓNDE
ESTABAS TÚ? 57
8.
LA TUMBA VACÍA 65
9.
¡BUSCO,
LUEGO ESTOY VIVO!
67
INTRODUCCION
Cuando el Padre Maciel, fundador
de la orden, me envió a las Misiones de
Quintana Roo, México yo era un fervoroso Legionario de Cristo. El mandato del
Superior General interrumpió mi último semestre en la universidad de Southern
Connecticut State College y truncó la maestría en educación. Yo me había creído
destinado a los colegios particulares de la Legión cuando me tocó trasladarme
sin demora a Chetumal y ponerme a disposición del obispo Jorge Bernal Vargas,
L.C. Los cambios repentinos de destino eran parte del paquete de ser Legionario.
Aunque la consigna de Nuestro Padre
me separó de los compañeros que sí lograron su maestría, el olor de los santos oleos todavía fresco en
las palmas me ayudó a practicar la obediencia pronta, ciega, alegre y heroica. `¡Total,
como el Padre me explicó en su carta, este cambio brusco era para “salvar mi fe
católica”, y yo quería conservar la fe a como diera lugar!
Mi entusiasmo juvenil – tenía a
penas 27 años- , el buen ambiente entre todos los misioneros Legionarios, y la
acogida del pueblo de Chetumal facilitaron el ajuste a un ambiente tan
diferente: de clima, vegetación y gente tropicales. Cura esforzado y creativo,
estrenaba mi sacerdocio visitando a las familias en sus humildes casas, celebrando
la misa, escuchando confesiones, bautizando, dando consejos, y construyendo la
iglesia de la Divina Providencia, “La Divina”, como decían los lugareños.
Comencé mi ministerio como “el padrecito de la bicicleta”, pues ése
era mi medio de transporte. En tiempo de lluvias costaba trabajo trasladarse desde
la casa cural en El Parque de los Caimanes hasta la Colonia López Mateos, sin
pavimentación y con las zanjas para la instalación de agua potable
peligrosamente abiertas. El gusto por la predicación y la formación de
catequistas, junto con el trato caluroso del pueblo compensaban por las
molestias materiales.
Al darme cuenta de que los
“hermanos separados” usaban la radio para difundir su mensaje y ganar adeptos,
me preguntaba por qué los católicos nos quedábamos con los brazos cruzados.
Armándose de valor el curita católico irlandés se acercó a la administración de
la radiodifusora local, Radio XEROO. Luego de darme una lección sobre la
separación entre iglesia y estado según la doctrina de Benito Juárez, el
gerente me dijo que tendríamos que pagar los minutos de difusión. Busqué
patrocinadores de los programas entre amistades, fieles, y comerciantes de la
Calle Héroes y del “Centro”. Me hice amigo de varios de ellos al ir a
“cobrarles” periódicamente. Me acuerdo que muchos quintanarroenses, yucatecos y
libaneses apoyaron generosamente, y más de uno me invitó el tomar el café.
El locutor, Roger Chan, aunque
era de otra religión, se portó muy bien conmigo y fue mi entrenador en la
cabina. Nunca olvidaré las primeras veces que me presentó – yo temblando de
miedo - a los radioescuchas. Con fondo musical de clavicémbalo de Bach, Roger entonaba con
voz rica y sonora ¡Y con Uds., el
Presbítero Pablo Lennon, párroco de la Divina Providencia!
Una cuaresma logramos que cada
día de lunes a viernes, a la hora consagrada - las dos de la tarde -un
sacerdote diferente diera una plática por radio. Fue en medio de esa lucha de
organización y entrega pastoral, pensando en mis fieles de Chetumal, que
hilvané estas reflexiones. Espero que conserven
todavía el frescor, idealismo y amor de entonces: ¡A continuación, la serie de charlas de una Cuaresma en Chetumal, Quintana
Roo, Viaje hacia la Pascua: Con Uds.,
el Padre Pablo!
1. ZARPAMOS
Querido amigo:
Te invito a que comencemos
juntos este tiempo, de reflexión, de retiro, de Cuaresma. Emprendamos juntos
este viaje hacia la libertad y el gozo, la Pascua. Corramos juntos esta
aventura espiritual. Subamos juntos a la nave, algo destartalada, la comunidad cristiana, la Iglesia. Surquemos juntos los mares hasta
llegar a nuestro destino: una isla del Caribe llamada Pascua.
Es un paraíso de playas,
palmeras, pájaros, paisajes y perfumes. ¿Has viajado alguna vez en barco,
ferry, panga, aliscafo? ¿Qué se siente? Emoción, miedo y valentía, curiosidad,
gusto, expectación, interés, ganas…
1.1 Hay que comprar el boleto:
A pesar de lo atractivo del destino, a pesar del
embrujo de esa isla paradisíaca, hay personas que